Durante el mes de noviembre, proponemos al alumnado de nuestro centro crear su propio microrrelato, género breve de gran popularidad en la actualidad. En esta dirección del blog de la materia de Lengua Y Literatura de 4º de ESO, podréis consultar las pautas para crear vuestro propio relato.
Consulta aquí cómo dar forma a tu microrrelato
Imagen tomada de Google imágenes
Aquí os presentamos, algunos de los mejores microrrelatos realizados por el alumnado de 4º de ESO
Solo
recordamos lo que nunca ha ocurrido
Aquel
manto naranja me resultaba familiar. Iba caminando, turbada por imágenes
fugaces que cruzaban mi subconsciente: eran evocaciones de cosas que nunca
habían ocurrido. Entonces lo comprendí: no eran mis recuerdos, sino los de
ella.
Adela
Reyes Godoy.
No
mires atrás
Llovía
muy fuerte.
Estaba
terminando de ver la película cuando se fue la luz en toda la casa. No tenía
linterna, pero aún así, sin ver nada, me acerqué al pasillo hasta el contador.
Algo me dijo que mirará detrás de mí.
Celia Ruiz Delgado.
Cerrar
con llave
Esa
misma mañana, mi marido me dijo que llamarían en cualquier momento. Cuando sonó
el timbre, los dejé entrar, tal y cómo me indicó, nunca dijo que debieran
salir.
Carmen Herrera Lorite
Perspectiva
El
chico estaba destrozado por la muerte de su hermano, así que pidió a su madre
que lo acompañara al entierro. Lo que lo paralizó fue descubrir escrito en la
parte frontal de la tumba el nombre de su hermano junto al de su madre.
Carlos Navarrete Deutor
Cuando
el reloj se rompió
Aquella
tarde, pensó que habría sido el mejor día de su vida.
Pero,
a la siguiente, aquel peso muerto seguía presionándole el pecho hasta dejarlo
sin respiración.
María
Godoy Godoy.
Herida
abierta
Lo
que me dijiste se quedó marcado en mí durante mucho tiempo. Hoy, tres años
después, seguía pensando en aquellas palabras. Sin saber que esta tarde
volvería a escuchar tu dulce voz. ¿Qué es lo que tratabas de decirme?
María
José López Arévalo.
Ahí
lo vi
Allí
estaba ante el atardecer. Mi expectante mirada solo se fijó en él. Se giró.
Sentí un escalofrío. Se dirigió a mí inevitablemente.
Miguel Casado Ruiz.
Hola, mi vida, ¿Cómo ha ido el día? Me imagino que estupendamente, como siempre, ya que en tu trabajo solo hay gente que te trata muy bien y la verdad es que a mí me hace muy feliz, que a mi mujer la traten como a una reina. En cambio, a mí el día me ha ido regular. ¿Por qué has puesto cara de extrañada? Bueno, te entiendo porque la semana pasada fue estupenda., no hicieron nada en contra de mi voluntad y además me dieron una paga reconocible. Me refería a hoy, porque como ya sabes, mis compañeros de trabajo son un poco brutos conmigo y aunque algunas veces me hacen bromas, yo que soy más débil no siempre pierdo, pero no me quejo y tampoco les digo nada. ¿Qué has dicho querida mía? Me duele el oído mucho desde esta mañana y no te he podido escuchar bien. Dilo más alto, por favor. Ahora te he escuchado, mi vida. No te preocupes, se lo diré, pero, de verdad, solo son bromas. ¿Y tu cabeza, te sigue doliendo? No te olvides de lo que te dijo el médico, desde la semana pasada, ya dejaste de sufrir para siempre. Tenemos que hacer caso a los expertos, ¿me estás escuchando, querida mía?
María Ramírez Godoy